A partir del año 2003, cada 10 de septiembre, se celebra el Día Mundial para la Prevención del Suicidio, gracias a un establecimiento de la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el objetivo de fomentar y promover en distintos países la implementación de acciones para su prevención. Es así como desde el Centro de Salud Familiar de Pucón, profesionales de la salud mental, dieron a conocer algunos de los programas y estrategias dirigidas a todas las edades de la comunidad, en colaboración con otras instituciones, para de esta forma lograr incentivar hábitos que estimulen una buena salud mental en los habitantes de la comuna.
Desde el Cesfam comunal, Eduardo Seguel, psicólogo del Programa Estrategias de prevención en salud mental, explica que el trabajo que realizan como equipo, se centra en estrategias preventivas, a través de: el Programa Espacios Amigables, el Programa Piloto, el Programa de acompañamiento, además de otras acciones que abarcan a personas de distintas edades. “La población de mayor riesgo que tenemos y que igual coincide con la población de riesgo a nivel mundial, son los adolescentes y las personas mayores”, señaló el profesional con respecto a la identificación de los grupos etarios más afectados en salud psicológica. Razón por la cual, gran parte de las estrategias que aplican están focalizadas en estos grupos.
En esta misma línea, el psicólogo compartió que a causa de que los adolescentes son el grupo identificado con mayor riesgo de presentar autolesiones, pensamientos suicidas e intentos suicidas, han puesto su foco en trabajar colaborativamente con toda la red comunal que existe, principalmente con todos los colegios, la Mesa de la juventud y la Oficina de la mujer, “tenemos una mesa intersectorial que reúne a gran parte de los programas que existen acá en Pucón”, indicó.
Por su parte la psicóloga, Morelia Novoa, invita a los padres y madres, o cuidadores a estar atentos a algunas señales que pueden expresar los menores que se encuentran experimentando pensamientos suicidas, “si notan a sus hijos aislados, que ya no pasan tanto tiempo con sus amigos, o les ven cortes, que es una señal roja, hacen cartas de despedida, y si observan una baja en el rendimiento académico, pueden ser alertas”.
Existen varias líneas de acceso para brindar ayuda psicológica en la comuna, primero, invitan a acercarse al Cesfam y solicitar atención, otra vía es realizar una coordinación con el colegio del estudiante para que lo deriven. Y otra manera, es cuando los jóvenes asisten a su control “Joven sano”, puesto que ahí, también les evalúan su salud emocional. “Y como centro de salud lo que podemos ofrecer son controles de salud mental, terapia breve, terapia a largo plazo, y contamos con una red de Villarrica, que una vez al mes envía una psiquiatra de niños y adultos, para atención”, explicó, el psicólogo Eduardo Seguel.
Aunque el panorama de salud mental parece preocupante para el equipo profesional del Cesfam de Pucón, y, vislumbran que se pueden incorporar nuevas acciones para seguir mejorando, también, compartieron que han observado aspectos positivos, destacando a padres y madres que se cuestionan las antiguas maneras de crianza e intentan transformarlas positivamente en la crianza con sus hijos e hijas para tener una mejor convivencia y salud.