Municipio pasó de cobrar 1 UTM a 3 UTM, lo cual genera inquietud en cientos de microemprendedores.
Artesanos, artistas, cocineros y vendedores ambulantes de distintos rubros esperan con ansias la temporada estival para desplegar sus puestos y aprovechar el gran arribo de visitantes a Pucón. Sin embargo, esta vez las condiciones han cambiado en miras al próximo verano: desde el municipio se anunció el aumento del coste de permisos precarios, pasando de 1 a 3 UTM por los meses de mayor afluencia. Es decir que, si antes los microemprendedores pagaban cerca de 67 mil pesos por toda la temporada, ahora deberán desembolsar más de 200 mil pesos. La nueva medida ha causado inquietud en buena parte de los trabajadores que buscarán obtener su autorización, ya que alegan no contar con los recursos para pagar el monto en una cuota antes del inicio del verano.
De 1 UTM por temporada a 1 UTM mensual
Hasta el año pasado, los permisos temporales —que habilitaban a los comerciantes para trabajar entre el 15 de diciembre y el 15 de marzo— tenían un coste único de 1 UTM, equivalente a cerca de 67 mil pesos. Este año, sin embargo, la normativa fue modificada: ahora el permiso cuesta 1 UTM por mes, lo que eleva el total a más de 200 mil pesos por la temporada completa.
La medida busca, según fuentes municipales, “ordenar el comercio, aumentar las arcas fiscales para invertir en el bien común y asegurar igualdad de condiciones para quienes utilizan espacios públicos y quienes cuentan con locales establecidos”, aunque el alza ha sido recibida con preocupación por una parte importante del rubro.
“No tenemos cómo pagar todo al principio”
El Trancura conversó con varios microemprendedores locales, quienes coincidieron en que el cambio los tomó por sorpresa. “Cada verano hacemos un esfuerzo grande para instalarnos, comprar materiales y abastecernos. Pero pagar tres UTM de una sola vez es demasiado. Muchos simplemente no tenemos ese dinero en diciembre”, comentó una vendedora de artesanías.
Otros comerciantes itinerantes se organizaron e ingresaron una carta en la Oficina de Partes del municipio, solicitando que se les permita pagar las tres UTM en dos cuotas, con el fin de no quedar fuera de la temporada. “No pedimos no pagar, solo queremos que nos den facilidades. Vivimos del verano y recién empezamos a generar ingresos en enero”, señaló otro emprendedor que trabaja cerca de Playa Grande.
Opiniones divididas: “prefiero pagar, pero trabajar tranquilo”
Aunque muchos se han mostrado en desacuerdo, también hay quienes valoran la medida. Algunos argumentan que el aumento del coste puede traducirse en un mejor control y orden en los espacios públicos. “Yo prefiero pagar ese monto si eso significa que voy a trabajar tranquilo, sin persecuciones ni fiscalizaciones abusivas como me pasó en administraciones pasadas. Tiempo atrás había mucho desorden”, señaló una vendedora de frutas y verduras.
La medida ha evidenciado una división entre quienes buscan regularizar completamente su actividad y quienes consideran que el alza amenaza la subsistencia de los pequeños comerciantes que dependen de la temporada alta.
Más de 100 millones en ingresos municipales proyectados
Desde el Centro de Negocios de la Municipalidad de Pucón estimaron que cerca de 500 microemprendedores intentarán obtener su permiso para la temporada 2026. Si todos pagaran la tarifa completa, el municipio recaudaría más de 100 millones de pesos.
No obstante, los trabajadores esperan que la autoridad municipal reconsidere la decisión o implemente mecanismos de pago flexibles que permitan facilidades.
Una tradición que busca sobrevivir
Los permisos precarios o de temporada forman parte de la identidad veraniega de la comuna. Muchos emprendedores llevan décadas instalando sus puestos en los mismos lugares, compartiendo con turistas y vecinos que ya los reconocen. Para ellos, más allá de los números, este trabajo representa una forma de vida.
“Somos parte del paisaje de Pucón. Lo que hacemos también aporta al turismo y al encanto del verano. Solo pedimos que no nos dejen fuera”, concluyó uno de los locatarios afectados.
El tema, que ya genera debate, promete seguir dando que hablar en las próximas semanas, mientras la Municipalidad define cómo implementará el cobro y si accederá a las solicitudes de pago en cuotas presentadas por los microemprendedores.
